El 'Novorossiysk' --el primer submarino de la Flota de la Marina
rusa en el mar Negro dotado de tecnología 'stealth', que le hace casi
invisible a los radares-- ha sido botado en los astilleros
Admiraltéiskie, en San Petersburgo, en el oeste de Rusia, según ha
informado la agencia de noticias oficial RIA Novosti.
El 'Novorossiysk', cuya construcción comenzó en agosto de 2010, es
el buque insignia del programa Varshavianka, también conocido como
clase Kilo Mejorada en terminología OTAN. Los submarinos de esta clase
son capaces de detectar un blanco a distancias hasta tres o cuatro veces
superiores a las que necesitan los sumergibles análogos de otros
países, según datos de la Marina rusa.
"Una de las flotas más antiguas de Rusia, la del mar Negro,
adquiere por fin su componente submarino gracias a esta serie", ha
destacado el segundo jefe de Estado Mayor de la Marina rusa, el
contralmirante Victor Bursuk, en la ceremonia de botadura celebrada este
jueves en los astilleros militares de San Petersburgo.
Este mismo astillero está construyendo en la actualidad para la
Flota del mar Negro otros dos submarinos similares, el 'Rostov del Don' y
'Stari Oskol', así como sumergibles del programa 636.1 destinados a la
exportación.
En total, la Flota del mar Negro de la Marina Rusa tiene
encargados seis submarinos de esta clase, que deben ser entregados en
2016. Los submarinos diésel-eléctricos de este programa desplazan 3.100
toneladas, tienen una velocidad máxima de 20 nudos y pueden sumergirse a
300 metros. Con una tripulación de 52 militares, el sumergible está
armado con 6 tubos lanzatorpedos de 533 milímetros y minas.